En el marco de la 58 Edición del Festival de cine de Sitges, se presentó en la Sección Oficial Fantastic a Competición, "Good Boy", ópera prima de Ben Leonberg, director con experiencia previa en cine narrativo y realidad virtual. Recién estrenada en Filmin, nos presenta un largometraje un tanto peculiar.
"Good Boy" es una película de terror indie noruego que sorprende principalmente por su original premisa: la historia está contada casi en su totalidad desde la perspectiva de Indy, un perro leal. Esta premisa narrativa es a la vez su mayor fortaleza y su principal debilidad.
Sinopsis: Tras la muerte de un familiar, Todd (Shane Jensen) se traslada con su perro Indy a una antigua granja rural que perteneció a su abuelo (Larry Fassenden). Aunque se rumorea que la casa está embrujada por un ente malévolo, Todd ignora las advertencias.
Y precisamente ahí radica la gracia de toda esta película. El punto de vista canino es un recurso narrativo fresco y, en su mayoría, ejecutado a la perfección. Invita al espectador a un mundo donde los sentidos del perro (vista, oído) son la guía principal, y algo diferente para nosotros, generando una inmersión única en el miedo y la confusión de Indy ante eventos sobrenaturales que los humanos pasamos por alto. Su lenguaje corporal y reacciones son tan convincentes que soportan el peso emocional de la película, logrando que el público empatice profundamente con su lealtad y su desesperación.
El film, logra crear una atmósfera de suspense eficaz, con un uso inteligente de ángulos bajos de cámara y sombras para sumergir al espectador en el punto de vista del perro.
Por el contrario, la trama, aunque intrigante e interesante al principio, se vuelve algo repetitiva al poco tiempo. Consiste en gran medida en escenas de Indy percibiendo amenazas que su dueño ignora, lo que acaba resultando monótono y tedioso. Además, los personajes carecen de profundidad y hay veces en que no se acaba de entender los problemas que tiene el dueño ni lo que está pasando realmente.
En cualquier caso, creo que es una película interesante por la originalidad del enfoque y la excelente actuación de su prota canino. Sin lugar a dudas, no os defraudará.
Mi puntuación: 7/10
David Sanmartí
@ddsanmarti
Festival de Sitges 2025
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